‘Unidad Móvil’ aborda la caza furtiva en nuestra comunidad

Esta actividad ilegal genera cada año una media de 600 denuncias. El programa de este viernes se pregunta qué razones llevan a actuar a un cazador furtivo al margen de la ley

¿Qué es un cazador furtivo? Este viernes el equipo de ‘Unidad Móvil’ va a sumergirse en todo lo que rodea esta actividad. El furtivo actúa al margen de la ley, pero hay diferentes formas de quebrantar las normas: pueden carecer de licencia, no respetar las vedas o utilizar técnicas o artes no permitidas por el Plan General de Caza.

Algunas de estas acciones son infracciones administrativas pero otras pueden llegar a constituir un delito penal que puede acarrear penas de hasta dos años de cárcel. Los reporteros del programa hablarán con un cazador furtivo que explica por qué no respeta la normativa. Su principal motivación es la obtención de buenos “trofeos”: la cornamenta o los colmillos de los ejemplares abatidos.

La vigilancia contra los furtivos es intensa, sobre todo por la noche. Salvo excepciones, en este horario no está permitido cazar. Las cámaras de ‘Unidad Móvil’ acompañn al Seprona de la Guardia Civil en una de sus salidas.

“En los últimos meses han cazado dos corzos de forma ilegal en mi coto. Uno de ellos pasó herido a mi lado mientras yo estaba cazando. Eso quiere decir que el furtivo estaba cerca. Una situación peligrosa para los dos”. Es el testimonio de José María Rodrigo sobre la presencia de caza ilegal en su coto. Lo que le ha pasado no es un hecho aislado, en los últimos meses han aparecido otros animales muertos y decapitados en los terrenos de otros cazadores. Por ejemplo en los del productor de documentales de caza, Pedro Ampuero.

La pesca ilegal es otra de las lacras del furtivismo. El siluro y la carpa son las especies más buscadas con un objetivo: su comercialización en el extranjero. Se calcula que esta compra-venta al margen de la ley puede mover un negocio de unos 100.000 euros anuales. Desde hace seis años ha habido varias operaciones para acabar con esta actividad. Una de ellas, “Glanis”, acabó con la detención de 23 personas.

Los guardas del Coto “Mar de Aragón” se encargan de la vigilancia de los embalses desde 2015. Ahora el problema se ha traslado a la zona libre del rio Ebro, según cuentan desde las asociaciones de pesca deportiva.

¿Se pueden coger más de tres kilos de setas en una zona no acotada o usar rastrillos en la recolección? Rotundamente no, aunque los furtivos si lo hacen. Esto puede llegar a dañar de tal forma el terreno forestal que podría ser considerado un delito penal. Con las previsiones favorables de este año en cuanto a setas, la alerta es máxima. El Seprona de Teruel recorre todos los rincones de los montes para evitar la aparición de grupos organizados que en los últimos años han recogido grandes cantidades de setas para venderlas después.

Todas estas historias y testimonios, este viernes a las 21:35 horas, en “Furtivos” de ‘Unidad Móvil’.

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