'Unidad Móvil' descubre esta semana las mil caras del Gállego

Este viernes ‘Unidad Móvil’ (21:35h) discurre con el río Gállego y conoce su ajetreada vida desde su nacimiento hasta su desembocadura

El río Gállego es uno de los grandes ríos de Aragón y presenta una enorme diversidad a lo largo de sus más de 200 kilómetros de recorrido, debido en parte a la gran variedad natural de las tierras que atraviesa. Nace en el pirineo a una altitud de 2.200 metros y desemboca en el río Ebro a la altura de Zaragoza. ‘Unidad Móvil’ disfruta esta semana de las aguas bravas en Murillo de Gállego, conoce la recuperación del descenso de nabatas en el río y asiste a las prácticas de rescate que lleva a cabo la Guardia Civil.

‘Unidad Móvil’ vive el esplendor del río Gállego en su nacimiento y a su paso por Sallent de Gállego. El programa sigue el curso del río y se detiene en el embalse de Lanuza, que recoge las aguas del río. En este punto, el río muestra su cara más amable y divertida y se convierte en el lugar ideal para disfrutar de los deportes náuticos.

Además de la parte lúdica del río, el programa también conoce su cara más práctica. Una vez a la semana, el Grupo Especial de Actividades Subacuáticas de la Guardia Civil (GEAS) de la Guardia Civil de Huesca se mete en el Gállego para hacer prácticas de rescate. No hay un perfil claro de los casos que se encuentran, desde pescadores a turistas que han ido a Murillo de Gállego a hacer rafting. El nivel de las aguas hace cambiar el río cada día y por lo tanto cada rescate es un mundo. En lo que va de año este grupo ya ha intervenido en cinco ocasiones.

El río Gállego también es historia. Gracias al empeño de la Asociación d’a Nabateros de Galliguera, las nabatas volvieron al río hace quince años. Los miembros de esta asociación cuentan al equipo de ‘Unidad Móvil’ cómo consiguieron rescatar este viejo oficio perdido hace un siglo.

A su paso por la comarca de las Cinco Villas, el río Gállego cobra una especial importancia para la localidad de Marracos. Esta localidad siempre ha vivido de las aguas del río Gállego recogidas en el embalse de Ardisa.

Al igual que Marracos, la huerta de Zaragoza se riega en buena parte con las aguas del río Gállego. Un total de 16.000 hectáreas dan sus frutos gracias a este afluente del Ebro. El embalse de Santa María de La Peña se construyó hace 105 años con dinero de los regantes para asegurar el agua a la ribera zaragozana del Gállego.

El Gállego llega a Peñaflor con su característico color turquesa. Un color que se va oscureciendo a medida que va llegando a Zaragoza, consecuencia de los vertidos industriales. Tras más de 200 kilómetros, el Gállego se funde con el Ebro unos metros más abajo del azud del Ebro en Zaragoza.

‘Unidad Móvil’, todos los viernes a las 21:35 horas en Aragón TV.

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